HOTUSA.

Hotusa crece en el corazón de Galicia

El grupo hotelero contrata en menos de cinco años a 190 personas en Chantada

El primer consorcio mundial de hoteles independientes tiene uno de sus centros neurálgicos en el corazón de Galicia. Se trata de Hotusa, un grupo empresarial fundado en los años 70 en Barcelona por el gallego Amancio López Seijas y que en los últimos tiempos ha ido extendiendo su influencia de forma exponencial, con crecimientos anuales de dos cifras hasta alcanzar en el 2015 una facturación cercana a los 1.000 millones de euros. El grupo abrió en el 2012 un pequeño centro de trabajo con siete empleados en Chantada, la localidad lucense en la que nació Amancio López hace 62 años. Hoy son ya cerca de doscientos trabajadores y las previsiones de la compañía pasan por seguir aumentando plantilla.

Al frente de aquel primer grupo que llegó a Chantada en noviembre del 2012 estaba Antonio Granados. Cuatro años y medio después, aquí sigue, en la coordinación del departamento de administración y con ochenta personas trabajando con él. «Desde Chantada -explica- llevamos el 80 % de la gestión administrativa de los hoteles que lleva directamente el grupo», explica.

Su departamento fue el que ensayó el aterrizaje en Chantada y a partir de su experiencia la empresa fue incrementando plantilla y añadiendo nuevas áreas de actividad, todas de gestión interna del conglomerado de hoteles del grupo. El proceso fue lento al principio, pero en los últimos dos años se ha disparado. En estos momentos, Hotusa emplea en Chantada a alrededor de 190 personas en cinco divisiones: contratación hotelera, informática, reservas y márketing, además de administración. El grupo mantiene su sede principal en Barcelona, pero en Chantada suma ya casi la mitad de la plantilla que tiene en la central.

Este crecimiento tan rápido ha sorprendido a Hotusa sin la infraestructura precisa. En estos momentos, opera en un edificio de viviendas de la calle Rosalía de Castro, y no sin tensiones con alguno de los vecinos. Pero ya ha adquirido una parcela en otro punto del casco urbano para construir en ella una nueva sede corporativa a la que trasladará a todo su personal local.

Una inyección económica

Igual que Antonio Granados, andaluz de la localidad cordobesa de Benamejí, buena parte del personal de Hotusa en Chantada procede de fuera de Galicia. Su llegada ha supuesto una inyección económica apreciable para el limitado mercado inmobiliario local, en un casco urbano que no llega a los 5.000 habitantes. Los problemas para disponer de trabajadores con la preparación precisa para según qué funciones es uno de los retos a los que se ha tenido que enfrentar la compañía.

Mateo Varela, el responsable del departamento de márketing en Chantada, admite que la disponibilidad o no de personal es lo que está determinando el ritmo de crecimiento de cada sección. El presidente de la empresa, admite Varela, está muy interesado en contratar gente de Chantada y su comarca, pero en ocasiones no resulta fácil. Por eso, la firma ha colaborado con un instituto local para la puesta en marcha a principios de este curso de un ciclo de Administración y otro de Turismo para cuyos alumnos ofrece plazas de prácticas.

La aportación personal de Amancio López Seijas

Amancio López Seijas fundó Hotusa en 1977 cuando tenía 22 años y solo una corta experiencia laboral en el sector hotelero. Para trabajar tuvo que dejar su Chantada natal y marcharse a Barcelona, una decisión similar a la que tuvieron que tomar decenas de convecinos de su misma generación, y de otras que vinieron después. La expansión de Hotusa en Chantada es su aportación personal para tratar de revertir esa realidad.

Desde finales de los años 70, la empresa de Amancio López Seijas cimentó su crecimiento sobre la base de los hoteles independientes, que suelen sufrir para competir en ventas con las cadenas del sector. La prestación de servicios a estos hoteles sigue siendo una de las patas del negocio de la empresa. Alba Fontán es la responsable en Chantada del departamento de contratación, uno de los servicios básicos que ofrece Hotusa. «O que facemos -resume- é facilitar aos nosos hoteis asociados o acceso a unha rede internacional de venda de habitacións capaz de chegar a un cliente en calquera parte do mundo». Los establecimientos asociados son ya decenas de miles.

La otra pata es la gestión de sus propios hoteles, que Hotusa explota bajo distintas fórmulas en Europa y América. Son suyos los de las cadenas Eurostar y Exe, pero también decenas de establecimientos que conservan sus propias marcas, como el caso del recién adquirido Gran Hotel de Lugo, y que en unos casos Hotusa gestiona en propiedad y en otros en régimen de alquiler. «Dunha ou doutra maneira -explica Mateo Varela-, nestes momentos xestionamos de maneira directa uns 180 hoteis».